El pobre cazo estaba triste, poco a poco habían desaparecido todos sus conocidos, primero los tenedores, después las cucharas, las cucharillas, los cuchillos, hasta su mejor amiga la sopera ya no estaba. Pero vino su salvadora y lo rescató del olvido, le dió dos buenos amigos y lo puso en el mejor sitio de la cocina. Ahora brilla con luz propia.
Ohhh!!! espectacular,ahora es el rey de la cocina.Bss apretaos!!!
ResponderEliminarI adore stuff like this!Good work!
ResponderEliminarDI-VI-NO!!! Me encantó! Saluditos!
ResponderEliminarUNA SOLA PALABRA PARA DECIRTE LO QUE ME PARECIO:
ResponderEliminar¡¡¡FABULOSOOO!!!
BESOS!
Original donde los haya... y símpatico por su simplicidad...
ResponderEliminarEncantado de encontrar tu espacio cargado de tanta imaginación!!!
Un saludo y enhorabuena!!
Que buena idea, me gusta muchisimo, tambien tengo yo por ahi algunas piezas... ya sabes...
ResponderEliminarUn beso enorme y feliz semana wapa
Hace tiempo que no pasaba por tu blog y este cuadro me ha encantado. Seguramente haga algo parecido con unos cubiertos de alpaca desparejados que guardo por su algún día se me ocurre algo. ¡Muy buena idea! y te ha quedado precioso.
ResponderEliminarPrometo no tardar tanto la próxima vez. Un abrazo,
Aintzane.
Todos los que formamos parte de Los Espíritus de Haddock, damos la bienvenida a nuestra nueva amiga olé, tu imaginación será nuestra aliada.
ResponderEliminarNice ♥♥♥
ResponderEliminarWish you a lovely evening!
Hugs Hildegunn
Increible transformación.
ResponderEliminarLuce precioso este cuadro.
Saludos.
amoroso, como tu!!!!!! congratulations!!!!
ResponderEliminarTe ha quedado un cuadro precioso, me encanta ¿como has hecho el dibujo de los cubiertos?, me encanta como te ha quedado.
ResponderEliminarBesitos guapa